cuando la tristeza y la alegría viajan en el mismo tren


vida intensa

Vida intensa...una semana puede parecer un mes, pero cuando pasa un mes, éste, te pareció un suspiro...reimos, lloramos, nos emborrachamos, nos arrepentimos, olvidamos, perdemos, ganamos...pero supongo que al final, recordaremos este año, como el mejor de nuestras vidas.

Supongo que al final, recordaré a Laura como la rubia que todo lo arreglaba, la que llamaba a mi puerta y decía “madi, has llorado, ya me estás contando que pasa”, supongo que la recordaré, como la persona que me daba fuerza, la que confiaba en que yo podría, la que a pesar de ser pequeña quiso verme como grande.

Supongo que cuando este loco siroco pase, será el acento portugués de Bruno lo que eche tanto de menos, supongo que recordaré días de sol en una terraza, mañanas de resaca, y alguien en quien poder confiar, las 24 horas del día, ya sea por teléfono, o tras el muro de mi colorido cuarto.

Supongo que cuando me vaya, Cristina dejará de ser mi compañera de noches locas, dejará de ser la adicta a salir, la catalana que pasó de ser mi nueva vecina a ser mi hermanita en Darmstadt. Supongo que entonces, sólo entonces, será la única persona que me conocía.

Supongo que será a todos, a quien recuerde con mucho mucho cariño, cuando todo termine. Pero especialmente en ellos tres, pensaré cuando me pregunten por el año de mi vida, por el sitio en el que quiero estar, por la vida que quiero volver a repetir. Supongo que los recordaré siempre, supongo que alguna vez lloraré al hacerlo, pero en el fondo será mentira, porque algo en mí será muy feliz, porque no hay nada mejor, que tener a alguien al lado, con quien soñar.

Gracias.

Os quiero.










Gracias a todos los que participaron!!

1 comentario:

Flinkitunki dijo...

me ha encantado Madi!!!

Y tienes toda la razón, cuando pase este anyo, solo unos pocos quedarán por siempre, lo bueno es haberlos elegido bien y luchar por mantenerlos.